Experimentar a Dios para renovar la iglesia
Memoria y perspectiva en torno a una pastoral inclusiva
Resumen
En este artículo, examinamos la tensión entre las pastorales tradicionales, centradas en la sanación y transformación espiritual desde la misión convencional, y la propuesta de la pastoral luterana inclusiva en Costa Rica, entre 2005 y 2019. Esta última busca no solo la transformación social, sino también la renovación eclesial, priorizando la experiencia de Dios desde la comunidad y promoviendo la integración de sectores históricamente excluidos. Distinguimos entre la pastoral experimental, orientada a evangelizar poblaciones específicas, y la pastoral experimentadora, que, antes de transmitir un mensaje de fe, busca comprender las realidades de los marginados, desafiando las nociones hegemónicas de cuidado y salud. La comunidad luterana inclusiva se posicionó como pionera en la apertura a personas LGBT+ y en la promoción de una lectura bíblica desprejuiciada. Sus principios metodológicos clave son el silencio teórico (suspender la teología excluyente para escuchar las voces marginadas y a Dios) y el desarme operativo (eliminar discursos y acciones discriminatorias). La necesaria renovación eclesial exige hoy este proceso de experimentación y aprendizaje, reconociendo que la diversidad es un hecho y la inclusión un objetivo.