Vida  y

Pensamiento

Revista Teológica de la Universidad Bíblica Latinoamericana

Volumen 44, Número 1  -  Año 2024  -  San José, Costa Rica

 

Repensar para

resistir y re-existir:

Desafíos actuales a la

teología de la liberación

 

 

 

 

 

 

Presentación

 

Miguel España – Karla Ann Koll

 

pp. 7-14

 

 

 

 

 

Presentación

 

Aún cosechamos los frutos de los encuentros, diálogos y sentipensares que posibilitó la Cátedra de Teología Latinoamericana “Juan Mackay” 2023 en torno a la actualidad y desafíos de la Teología de la Liberación. Con este número la revista Vida y Pensamiento aporta a la sociedad y las iglesias reflexiones y orientaciones desde la fe para la construcción de la paz desde la justicia social y ecológica. La primera entrega (Vol. 43 Núm.1) presenta las ponencias públicas sobre la historia, desafíos y actualidad de la Teología de la Liberación vista desde teólogos y teólogas prominentes de diversas partes del Sur Global. La segunda entrega (Vol. 43 Núm. 2) presenta exposiciones de personas biblistas que examinan los aportes de la Teología de la Liberación a la exégesis y hermenéutica bíblica y nos proponen nuevas mediaciones epistémicas y metodológicas frente a los desafíos de hoy.

 

En el presente número (Vol. 44 Núm. 1) usted podrá encontrar importantes aportes al desarrollo de perspectivas liberadoras de la Teología de la Liberación desde diferentes énfasis epistémicos y metodológicos. Esta entrega de nuestra revista inicia con una invitación de bailar y así recordar que el conocimiento, la resistencia y la liberación pasan por nuestros cuerpos. El ecomartirio sufrido por personas que defienden sus territorios de la depredación del sistema extractivista neoliberal trae nuestra mirada las luchas actuales en la región.  Las realidades de hoy llevan a la revisión y actualización de categorías centrales de la Teología de la Liberación como Pueblo o Popular, Pobre y Teología Política. Además, surgen nuevas y desafiantes formas del quehacer teológico desde nuevos sujetos como las diversidades sexo/genéricas, desde la cosmoviviencia indígena, dentro del contexto global de la crisis climática y desde la perspectiva de la ecocomplejidad. Se pregunta también como la teología puede contribuir a construir la esperanza activa en el contexto actual. Finalmente, se cierra con una propuesta de diálogo entre la Teología de la Liberación y las Teorías pos/Decoloniales.

 

Veamos lo que presentan cada uno de los artículos que conforman el conjunto de este número de nuestra revista:

 

Heike Walz nos invita a ver en la danza un poder curativo, y a la vez, un potencial político liberador. La danza es lenguaje de resistencia, convierte los cuerpos danzantes y cantantes en voz de protesta. La danza es una forma de conocimiento de las poblaciones indígenas, de las comunidades afrodescendientes y poblaciones oprimidas, y por ello plantea la posibilidad de la decolonización de los estudios religiosos y la Teología. Como ejemplo, Walz menciona al tango, entendido como un “reflejo de la realidad social”, surgido en contextos de pobreza, migración y exilio de las personas migrantes afroargentinas, gauchas, europeas, caribeñas y judías, que soñaban con una vida mejor. Del saber del tango como danza y resistencia, resulta la idea de la epistemología tanguera: Bailo tango; por lo tanto, soy.

 

Elizabeth Gandolfo extrae las consecuencias teológicas del ecomartirio en América Latina. Parte de los testimonios de ecomártires por defensa de la vida, como el caso de Chico Méndez o Berta Cáceres, para afirmar que martirio desde la perspectiva de Liberación es “resultado del compromiso de resistir a las ideologías y los sistemas que justifican el sacrificio y el sufrimiento de las mayorías pobres del mundo en aras de saciar los deseos consumistas de la minoría rica y poderosa”. La memoria y reflexión de los ecomártires desenmascaran los ídolos de la muerte que exigen sacrificios, asimismo, llama a la conversión ecológica a la iglesia.

 

Randall Carrera indaga sobre la Teología política de Ignacio Ellacuría, ubicando su pensar desde su existencia personal y académica, influida por el eminente filosofo, Xavier Zubiri. Carrera resume el núcleo de la Teología política de Ellacuría en cuatro puntos claves: la situación de las mayorías empobrecidas, la necesidad de un replanteamiento de la Teología tradicional, la relación existente entre teoría y praxis y la relación existente entre el reino y la salvación histórica. Además, señala que el evangelio es indispensable para una autentica Liberación de los pueblos. Sin embargo, es necesario reconocer que el mensaje evangélico por sí mismo no es suficiente. La clave se puede hallar en el actuar político de Jesús, el cual fue asesinado como consecuencia de su actuar profético que dejó en entredicho al poder político, económico y religioso de su época.

 

En el marco del desarrollo de la Cátedra “Juan Mackay” tuvimos la alegría de conocer a Pablo Bordenave (q.e.p.d), capellán del Colegio Ward de la Iglesia Metodista de Argentina, quien falleció repentinamente a pocos días de iniciar la Cátedra. Hacemos una mención especial en honor a su trayectoria como pastor y académico, y por la calidad de su análisis en su artículo presentado. Agradecemos a su esposa, Cecilia Naddeo, por permitirnos publicar póstumamente el aporte de Pablo. En su artículo, Bordenave recupera la crítica temprana que realizara el biblista Severino Croatto a los conceptos de “pueblo” y “popular” esgrimidos por filósofos de la Liberación del llamado “Grupo de Salta” en Argentina en los primeros años del movimiento. Severino, según Bordenave, propone no solo la Liberación del pueblo, sino también, un proyecto de Liberación dentro del pueblo que debe partir de la cultura popular y regresar a ella.

 

Desde una perspectiva europea, Johannes Witkowky lleva a cabo una crítica al concepto de pobre en la inicial Teología de la Liberación, ya que ve una disonancia entre la idea teológica de pobre y las personas reales pobres: la idea teológica idealiza a los pobres, y esto tiene una consecuencia negativa en la pastoral, por lo que los pobres terminan siendo un ídolo. Witkowky propone, entonces, entender el uso de la idea de pobre en Teología como una “figura del pensamiento”, la cual no trata de identificar la idea con la realidad de las personas pobres en diversos contextos, sino solamente sirve como modelo de análisis. Witkowsky tiene en su mira hacer posible la adaptación de la socioanalítica de la Teología de la Liberación en diferentes contextos, donde la categoría “pobre” no impida reconocer otros tipos de carencias o vulnerabilidades.

 

Enrique Vega entabla un diálogo con la Teología de la Liberación, específicamente desde las categorías “reverso de la historia” y “Liberación”, a partir de la preocupación por una educación teológica que tenga en consideración a las diversidades sexo-genéricas como sujetos de Liberación. Aunque la Teología de la Liberación encubrió la mediación sexual y de género en sus inicios, ahora Vega aboga por releer la historia oficial desde “el reverso de la historia heterosexual” y afirmar la presencia de la diversidad sexo-genérica en los diferentes espacios negados. Asimismo, recupera la noción de “Liberación” para trascender la idea de salvación de lo moralizantes y sus mecanismos de exclusión y control, para hablar de salvación como Liberación.

 

Sofia Chipana propone pensar el buen vivir desde la cosmovisión y espiritualidad andina orientada por la dualidad e interrelacionalidad de lo femenino y masculino como principios que generan fisuras en la matriz colonial. Chipana amplía la visión tradicional del Bien Común, más allá del axial bien humano, por un común bien basado en la relacionalidad entre todos los seres vivos, incluyendo plantas, animales, ríos, etc. En esta Comunidad de Vida de maestras y ancestras, vive la memoria resistente y re-existente indígena. Ante el desequilibrio de la vida introducido por la matriz colonial, Chipana invoca la cosmoviviencia aymara para crear comunidades relacionales para el bien común. Así plantea una fuerte crítica a las teologías evangelocentricas, incluyendo la Teología de la Liberación, que no pueden ver en las tradiciones indígenas fuentes legitimas del quehacer teológico, y que siguen reproduciendo el pensamiento hegemónico y universal.

 

Karla Ann Koll presenta un desafío fundamental a la Teología de la Liberación: repensar su propia contextualidad dentro del contexto planetario de la crisis climática. Esto requiere devolver a la categoría analítica “contexto” su capacidad crítica. La visión planetaria permite ver las relaciones tanto entre distintos contextos como entre lo particular y lo universal, ya que los daños que el sistema capitalista extractivista inflige contra cada contexto lastiman la biosfera entera. Entender la catolicidad como intercontextualidad vincula cada expresión de la iglesia con la humanidad entera y con la creación, a partir de y a través de sus particularidades, en la lucha a favor de la vida.

 

Miguel España propone revisar y actualizar el lenguaje liberador de la Teología de la Liberación a partir de la teoría de la complejidad, la ecojusticia multiespecie y la teología de la razón perijorética, y así recuperar su fuerza crítica y propositiva frente al lenguaje de dominación del tecnocapitalismo. Esta propuesta aprovecha los aportes de la visión de la complejidad de Edgar Morin y la propuesta de la simpoiesis de Donna Haraway para trascender el lenguaje antropocéntrico de la Teología, asimismo, radicalizar la crítica al modelo tecnocapitalista globalizante y de dominación.

 

Arianne Van Andel pregunta cómo mantener la esperanza en medio de la crisis ecológica que genera desesperanza y desmoviliza la acción. Pone en diálogo las ideas de esperanza en Jürgen Moltmann y Raimon Panikkar, con aportes críticos y nuevas categorías epistemológicas de teólogas feministas y latinoamericanas para repensar la esperanza activa desde lo cotidiano, la corporalidad y las emociones.

 

Nicolas Panotto nos llama la atención sobre la necesidad de plantear el diálogo entre la Teología de la Liberación y las Teorías Pos/decoloniales desde tres abordajes: metodológicos, epistémicos y genealógicos. Busca resaltar los aportes relevantes de ambas posturas, teniendo el cuidado de no subsumirlas en una teoría sistemática que invisibilice la riqueza de este diálogo, sino que reconozca tanto sus interseccionalidades como sus roces y choques. Panotto reflexiona sobre dos desafíos fundamentales en dicho diálogo: la profundización de la impronta pos/decolonial en la Teología de la Liberación y una crítica a los elementos moderno-céntricos que aún perviven en la Teología de la Liberación. El contexto actual de colonialidad del ser, del saber, del poder y aún del creer hace este diálogo imprescindible para las personas que buscamos aportar a las luchas por la vida desde nuestro quehacer teológico.

 

Damos gracias a Dios y a todas las personas que hicieron posible que la Cátedra de Teología Latinoamericana “Juan Mackay” 2023 fuera un verdadero espacio de encuentros, crítica teológica y propuestas afirmativas de la dignidad de toda la creación. Este número de nuestra revista queda como testimonio del don del Dios de la vida, presente en las diversidades de los contextos, disciplinas, aportes bíblicos y teológicos, asimismo, de sonrisas, abrazos virtuales y el dolor de la pérdida de un hermano, Pablo Bordenave. Seguimos haciendo camino al andar, tejiendo saberes, sentires y haceres, en la construcción de la Justicia del reino de Dios aquí y ahora.

 

Miguel España*

Karla Ann Koll**

 

Director/a invitado/a

 

 

 

 

 

*Es Magister en Teología Sistemática por la Universidad Evagélica Nicaragüense MLK Jr. y Licenciado en Teología por la Facultad Evangélica de Estudios Teológicos por parte del Centro Intereclesial de Estudios Teológicos y Sociales (Nicaragua). Docente en el campo de la ética, filosofía y teología.

Contacto: m.españa@ubl.ac.cr

 

**Es Doctora en Misión, Estudios Ecuménicos, e Historia de las Religiones del Seminario Teológico de Princeton (Estados Unidos). Profesora de historia y misión, además de directora de la Escuela de Ciencias Teológicas de la Universidad Bíblica Latinoamericana (Costa Rica).

Contacto: k.koll@ubl.ac.cr