Núm. 3 (2018): La teología de la cruz como crítica radical a la teología de la prosperidad
A través de un análisis profundo y crítico el autor nos conduce al momento preciso de una concepción teológica anacrónica, cuya dialéctica parece que será la orientación del quehacer teológico futuro. En los 500 años de la Reforma se valoró el evento desde varias perspectivas: históricas, sociales, políticas, espirituales, confesionales y ecuménicas. Un denominador común se pudo reconocer: El núcleo, para los reformadores giró en torno al regreso del evangelio como fuente de la renovación de la Iglesia y la sociedad, y como respaldo de la libertad de conciencia de todos los cristianos. “La libertad cristiana”, la cual Lutero formuló siguiendo al apóstol Pablo, es la libertad que resulta de una liberación, la liberación del auto-centrismo permanente o, como dice Lutero, del “encorvarse en sí mismo”. Así se hace la libertad “para los otros” en el amor al prójimo y el compromiso solidario para la justicia social.